Opcional. Esta página describe cómo desarrollar objetivos «SMART» para una hoja de ruta.
Definición de los objetivos
Los objetivos definen el resultado futuro que ha de alcanzarse. Cada uno de los objetivos contribuye a la consecución de la declaración de intenciones. Mientras que la declaración de intenciones debe ser concisa, los objetivos pueden entrar en detalles sobre los resultados que han de alcanzarse y desarrollar las posibles soluciones a los impedimentos descritos en la base de referencia. Todos los objetivos deben ser SMART, es decir, específicos, medibles, alcanzables, pertinentes y con plazos establecidos (specific, measurable, attainable, relevant and time bound).
Objetivos SMART
Específicos: Los objetivos deben ser concretos. Deben definirse de manera explícita e inequívoca, sin ningún tipo de ambigüedad. Consejo: Un buen punto de partida es la definición de objetivos basados en las seis preguntas básicas (quién, qué, cuándo, dónde, por qué, cómo).
Mensurables: Los objetivos deben incluir criterios que ayuden a evaluar los avances realizados y si se han logrado los objetivos.
Alcanzables: Las metas deben ser realistas, pero, a la vez, representar desafíos. Los objetivos demasiado fáciles o demasiado difíciles pueden desmotivar a las partes interesadas.
Pertinentes: Los objetivos deben ser significativos. Deben contribuir a la realización de la declaración de intenciones que se haya establecido para la facilitación del comercio.
Con plazos establecidos: Los objetivos deben ajustarse a un marco temporal. A tal efecto, los objetivos pueden incluir plazos. Consejo: La definición de un marco temporal puede ser útil incluso antes de definir una meta. Las partes interesadas deberían empezar por responder la pregunta: ¿qué podría lograrse en este período de tiempo determinado? Esto ayuda a gestionar las expectativas y garantiza que las discusiones entre las partes interesadas sean realistas. Si se trabaja con un determinado marco temporal, es más fácil de averiguar lo que es posible y lo que no.
Por ejemplo:
«Objetivo 1: Reducir el tiempo de transacción en un [XX%] estableciendo un entorno de comercio sin soporte de papel para las exportaciones para [fecha]. Se permitirá a los comerciantes presentar todos los documentos requeridos para la exportación por vía electrónica .»
“Objetivo 2: Reducir los tiempos necesarios para el levante de mercancías en un [XX%] para la importación mediante la mejora del sistema de gestión de los riesgos de las aduanas y la implementación de sistemas de gestión de los riesgos en otros organismos que se ocupan de las inspecciones, como el Ministerio de Agricultura y el Ministerio de Sanidad para [fecha].»
Identificación de indicadores de desempeño de los objetivos
La hoja de ruta debe establecer indicadores de desempeño para evaluar el logro de los objetivos (indicadores de desempeño de los objetivos). Estos indicadores son referencias que establecen qué condiciones demuestran que un objetivo se ha logrado con éxito o una acción se ha implementado de manera efectiva. En otras palabras, los indicadores demuestran los resultados.
Los indicadores deben ser cuantificables: necesitan tener una unidad de medida. Algunos ejemplos de indicadores son el tiempo requerido para el despacho de las importaciones, los costes de transporte de un contenedor o el número de inspecciones. Un indicador de desempeño de un objetivo (IDO) puede incluir una referencia a las bases de referencia anteriormente identificadas en la hoja de ruta. Por ejemplo, una disminución en los costes de transporte deberá medirse en comparación con el costo real en el momento en el que se elaboró la hoja de ruta. Las bases de referencia deben, por tanto, incluirse y documentarse adecuadamente si queremos usarlas como parte de los indicadores de desempeño.
Los indicadores de desempeño de los objetivos pueden utilizar también (o alternativamente) referencias internacionales que comparen la situación del país con la de otros países. Estos puntos de referencia son particularmente útiles si los objetivos de la hoja de ruta pretenden mejorar la situación comercial del país en comparación con la de otros países.
Las clasificaciones internacionales relacionadas con la logística y otros indicadores de facilitación del comercio son buenos puntos de referencia. Por ejemplo, el índice Doing Business del Banco Mundial, con sus indicadores de comercio transfronterizo , y el Índice de Desempeño Logístico pueden utilizarse como puntos de referencia.
Sin embargo, hay que ser siempre prudentes en la utilización de las clasificaciones internacionales como indicadores de desempeño. Es importante ponerlas en perspectiva. En primer lugar, es posible que la metodología utilizada para recoger los datos no siempre se base en criterios objetivos.
En el proceso de establecimiento de indicadores de desempeño de objetivos basado en puntos de referencia, un país debe considerar las siguientes preguntas:
- ¿Cuál es la posición actual de mi país? ¿Qué puntuación tiene mi país en los diferentes aspectos que se tienen en cuenta?
- ¿Qué países están en una situación comparable para evaluar si los objetivos de la hoja de ruta se están aplicando con éxito?
- ¿Qué países han desarrollado unas buenas prácticas de facilitación del comercio que me gustaría emular?
- ¿Cuál es la posición de los países que estoy utilizando como referencia?
- ¿En qué posición debería estar mi país en los siguientes [número] años? ¿Qué puntuación debería alcanzar mi país en los siguientes [número] años?