Calendario de ejecución

La hoja de ruta establece un marco de actividades que se realizarán en un período de tres a cinco años. Para este período de tiempo, debería desarrollarse un calendario general en el que se programe la ejecución de las actividades. Este calendario de ejecución de las actividades ayudará controlar los avances en la aplicación de la hoja de ruta.
Para este calendario de ejecución pueden dividirse las actividades en tres fases:

• Fase inicial: Esta fase, cuya duración variará según los países, no debería requerir más de un año. Durante esta fase, se debe establecer la estructura de gobernanza. Esto significa, por ejemplo, que se nombrarán los principales organismos encargados de la ejecución de cada actividad y se formarán los grupos de trabajo para la gestión de los diferentes proyectos. En esta fase es importante incluir actividades centradas en la implicación de las partes interesadas y en la comunicación y colaboración con ellas. Esto garantizará que todos los actores que participan en la facilitación del comercio entiendan los objetivos comunes y el alcance de las actividades de la hoja de ruta. Además, en algunos casos, las actividades de resultados inmediatos podrán llevarse a cabo ya en la fase inicial. Esta fase inicial deberá incluir también las actividades que tienen como objetivo el desarrollo de planes de proyecto detallados para la realización de los proyectos a largo plazo que se llevarán a cabo en la fase de entrega.
• Fase de entrega: Esta es la etapa más larga de la ejecución de la hoja de ruta. Incluye la realización de todas las actividades que deben llevarse a cabo en un período de uno a cuatro años. Durante la fase de entrega deben supervisarse estrechamente los indicadores de desempeño de los objetivos para garantizar que el país está bien encaminado para lograr los objetivos identificados.
• Fase de revisión: Esta fase tiene como objetivo 1) evaluar si se han logrado los objetivos de la hoja de ruta, haciendo referencia a los indicadores de desempeño de los objetivos y 2) elaborar una nueva hoja de ruta para los siguientes tres a cinco años. Idealmente, la fase de revisión debe comenzar entre seis y 12 meses antes de la fecha límite de conclusión de la hoja de ruta.

Las tres fases de la ejecución de la hoja de ruta se representan gráficamente en la siguiente figura: