Paso 1.

Retrasos en los Cruces Fronterizos

La importación, la exportación y el tránsito de mercancías y de los medios para transportarlos están sujetos a las reglamentaciones nacionales e internacionales. El cumplimiento de estas reglamentaciones se verifica y aplica cuando las mercancías arriban al país de tránsito o de destino. En la mayoría de los países, esto sucede en los cruces o estaciones fronterizas cercanas a las fronteras geográficas del país.

Los comerciantes, sus representantes y los conductores, por tanto, deben llevar a cabo múltiples trámites en los cruces fronterizos para liberar las mercancías. Este puede ser un proceso largo o rápido dependiendo de la organización que exista en el cruce fronterizo, de los procedimientos establecidos y del manejo de las formalidades. Los retrasos son comunes y las imágenes con largas filas de camiones que esperan se ha convertido en un símbolo de las barreras comerciales, en particular en los países en desarrollo en África.
Los tiempos de espera afectan de manera significativa el tráfico en tránsito y el comercio transfronterizo. Ocasionan tiempos de entrega impredecibles para los comerciantes y dificultan la participación de productores y dueños de carga en cadenas logísticas sensibles al tiempo. También incrementan los tiempos de espera para el pago a los vendedores y crean costos directos por el alquiler de los medios de transporte y para las tarifas de los almacenes. Mientras más rápido y predecible sea el proceso de liberación, mejor podrá el comerciante planear, administrar y optimizar las cadenas de suministro.

Necesidad de cooperación

Los procesos en los cruces fronterizos involucran a diversas autoridades. Además de las Aduanas, existen múltiples entidades que participan para llevar a cabo sus controles. Existen, al menos, tres categorías de entidades que participan: Aduanas, migración y otras autoridades gubernamentales de control, como salud, agricultura y servicios ambientales. La coordinación entre ellas es, por tanto, fundamental para reducir los tiempos de espera en los cruces fronterizos al integrar los procesos y coordinar las intervenciones respecto a las mercancías. Esta cooperación entre las entidades idealmente también se extiende a las administraciones a lo largo de la frontera para armonizar los horarios de oficina o para compartir la infraestructura y el equipo.

Medidas para reducir tiempos de espera

Otras soluciones que pueden contribuir a reducir el tiempo que se requiere para liberar las mercancías en los cruces fronterizos pueden impactar los procedimientos de verificación de los cargamentos. La administración de riesgos y el uso de tecnologías no intrusivas pueden reducir de manera significativa la duración de los reconocimientos físicos. La duplicación de las intervenciones por parte de distintas entidades crean esperas innecesarias. Por tanto, se requiere que lleven a cabo una coordinación de sus intervenciones para evitar este tipo de situaciones.
Otras medidas que tienen un impacto en el tiempo de liberación en los cruces fronterizos son: el despacho previo al arribo; el pago electrónico de derechos e impuestos; la posibilidad de pago diferido; y los esquemas de comerciantes autorizados que ofrecen privilegios para los comerciantes de confianza (como el despacho en las instalaciones de los comerciantes). Los regímenes de minimis también permiten a las administraciones agilizar la liberación de los cargamentos que no están sujetos al pago de derechos o que tienen bajo valor y posibilitan la liberación inmediata en cuanto se presentan los documentos de comercio. Las Aduanas pueden permitir entonces la liberación inmediata y de esta manera reducir los tiempos de espera en la frontera.

Facilitación del tráfico en tránsito

Una gran parte del tráfico en los cruces fronterizos en países sin litoral es de tránsito. Los acuerdos bilaterales, regionales o multilaterales pueden proporcionar un sistema/régimen de tránsito que facilite los procedimientos de tránsito aduanero y otros aspectos relacionados con el transporte. El tránsito bilateral y los acuerdos de transporte también regulan muchos aspectos de las operaciones de cruce fronterizo y son, por tanto, importantes para facilitar el tránsito y agilizar el paso fronterizo de las mercancías y de los vehículos en tránsito.